Cuando la temperatura sube, los días se alargan y el sol se vuelve más protagonista, algunos hábitos de consumo se modifican. Por eso, para seguir disfrutando de los vinos en verano hay que saber elegir bien y tener más de cuidado al servirlos. Está claro que la frescura es una sensación que va mucho más de la temperatura de servicio de un vino, y lograrla naturalmente no es tarea sencilla para los enólogos. Sin embargo, durante los últimos años se está dando una gran evolución de los vinos argentinos, y entre todas las novedades han surgido vinos ideales para disfrutar en verano porque son más refrescantes que los demás. Estos vinos tienen una acidez natural de entre 6 y 12 gr/l, dependiendo del tipo y estilo de vino, y un pH bajo. Es decir que la acidez se sentirá marcada, pero siempre deberá estar equilibrada. Para lograrlos, se debe partir de uvas frescas, cosechadas en su punto óptimo de madurez y con buena acidez natural. Luego, en bodega la elaboración también debe tener sus cuidados para preservar la vivacidad de la fruta, trabajando a temperaturas controladas y en tanques de acero inoxidable o vasijas de cemento. Pero más allá de las uvas y del tipo, hay técnicas específicas para lograr vinos más vibrantes en su paso por boca, y por consiguiente que puedan resaltar más su frescura. Una de ellas es la maceración en frío, ya que el contacto con las pieles a bajas temperaturas; para evitar que comience la fermentación alcohólica; permite a los mostos ganar en componentes que aportarán texturas y carácter. Prensados suaves, fermentación con racimo entero y pocos remontajes son otros métodos que buscan mantener tanto los aromas y sabores primarios de las uvas como su vivacidad natural.
Si bien es cierto que en esta época muchos cambian el vino por bebidas más refrescantes, la diversidad que ofrecen los vinos argentinos en la actualidad permite seguir disfrutándolos, incluso con altas temperaturas. Sin dudas, blancos, rosados y espumantes son los preferidos porque se sirven directamente de la frapera y bien fríos. Cabe destacar que esto opaca un poco los atributos y las complejidades de los mejores exponentes ya que el frío “anestesia” las papilas gustativas, además de bajar mucho la presión y, por consiguiente, debilitar los espumosos. Pero siempre se puede servir pasado de frío y no a la inversa, ya que el vino puede llegar a su temperatura óptima de consumo. Sin embargo, la mayoría sigue prefiriendo los tintos, y no solo con los asados que se multiplican durante las vacaciones sino también con pescados, y cualquier otra carne a la parrilla. Por suerte hoy son muchos los tintos que ofrecen expresión y concentración sin peso, lo que garantiza que se pueden servir refrescados; digamos a unos 14 grados; y ser apreciados en su plenitud. Suelen ser de cuerpo fluido, con un carácter frutal fresco y texturas vivaces, que con el frío se potencian, pero sin alterar su paso por boca agradable. Es decir que no se trata de tintos simples y livianos sino de vinos modernos y completos, incluso con crianza en barricas, pero de esa que no se siente. A estos vinos también se los puede tener en la frapera, y no importa si se sienten algo apretados, enseguida se acomodan en la copa.
Otra gran ventaja de vivir en un gran país productor es que hay opciones para todos los gustos y bolsillos. En esta recomendación, incluimos un Sauvignon Blanc referente del varietal en su categoría, que lleva 20 años haciendo de las suyas. También un blend complejo de Chardonnay y Semillón, dueño de una frescura compleja y una textura vivaz. Entre los tintos hay un Criolla de San Rafael, con paso fluido y muy buen carácter frutado. Un blend de los dos Cabernet de Paraje Altamira que, gracias a su estilo y elaboración, se puede disfrutar muy bien a más bajas temperaturas que los tintos habituales. Y por último un Malbec, porque nunca puede faltar un Malbec argentino. Es una novedad por donde se lo mire y se lo tome, porque además de ser una etiqueta nueva, es parte de la nueva camada de vinos de la bodega y, en este caso, apoyado en un estilo de elaboración muy tradicional. Esto, sumado al origen de la uva y al estilo que le dio la enóloga, lo convierten en un tinto que refresca el paladar con gracia y mucha intención.
Doña Paula Estate Sauvignon Blanc 2022
Bodega Doña Paula, Valle de Uco, Mendoza $1650
A principios del milenio este blanco marcó el rumbo de la variedad, al menos en nuestro país. Y casi dos décadas después sigue siendo referente en su categoría, porque posee mucha tipicidad en sus aromas y sabores bien herbales. Su trago es tan refrescante que se siente ‘crocante” en boca (crispy dicen los americanos). De paladar franco y vivaz, es una gran opción para tener siempre en la heladera y abrir la mesa. Beber entre 2022 y 2023.89 Puntos Portelli
Famiglia Bianchi Criolla Chica 2022
Bodegas Bianchi, San Rafael, Mendoza $2100
Este vino nace de viñedos muy antiguos en el distrito Cuadro Nacional de San Rafael. Y fue Silvio Alberto, enólogo de la casa, quién insistió para recuperarlo y que pueda formar parte de esta línea icónica. Sus aromas son amables y frescos, con dejos de cereza madura y especias secas. Paladar ágil y texturas incipientes, franco y de trago fácil. Ideal para beber algo refrescado. Beber entre 2022 y 2023. 90 Puntos Portelli
Calle Constantini Tocayos 2021
Lupa Wines, Paraje Altamira $6500
Juan Pablo Lupiáñez presenta su nuevo blend de Cabernets, obviamente de Paraje Altamira. De aromas frescos y paladar fluido. Trago mordiente no muy profundo, con algo especiado. Los taninos finos resaltan su vivacidad y sobre el final asoman notas de frutas negras ácidas. Por sus texturas equilibradas y sus características, se puede beber refrescado. Beber entre 2023 y 2025. 91,5 Puntos Portelli
Ruca Malen Capítulo 3 Malbec de Ánforas 2021
Bodega Ruca Malen, Gualtallary, Valle de Uco $12.000
Agustina Hanna está revolucionando los vinos de Ruca Malen, recuperando su esencia. Y en esta nueva etapa de la bodega ha dividido las líneas por capítulos para poder contar la historia. Este Malbec basa su carácter en el tipo de elaboración, ofrece aromas definidos y elegantes, con buen volumen y una frescura integrada, taninos granulosos y gran potencial. Beber entre 2023 y 2030. 94 Puntos Portelli
Perico Blanco 2021
Finca Suarez, Paraje Altamira, Valle de Uco $12.700
Juanfa Suarez avanza a pasos agigantados en su finca; fundacional de Paraje Altamira; a base de estudios del suelo y microvinificaciones. Y lo demuestra en este flamante blanco. Un blend de viña a base de Chardonnay y Semillón sobre caliche rosa, elaborado con racimo entero, prensa directa y fermentado en barricas viejas. De aromas minerales, con buen nervio y equilibrio. Fresco y de trago mordiente. Beber entre 2023 y 2026. 93 Puntos Portelli