La bodega Agrestis fue una de las primeras bodegas dedicadas 100% a espumantes de la Patagonia. Ubicada en General Roca, fue fundada por Norberto Ghirardelli a fines de la década de 1980. En aquel momento la provincia de Río Negro contaba con un programa llamado “Espumantes de las Zonas Frías”, el cual promovía la producción de vinos espumosos en la zona. Todo convertía a la inversión en más prometedora.

Norberto es ingeniero agrónomo, nacido y criado en el Alto Valle de Río Negro. Luego de haberse recibido en la Facultad de Agronomía de la UBA, volvió a su ciudad natal con intenciones de producir vinos (sobre todo vinos espumantes). Comenzó un proyecto con unos amigos, a modo de hobby, pero ellos decidieron abrirse. Y continuó solo, pero con una visión más comercial. “Me gustaba la idea de producir vinos espumantes porque me gusta tomarlos. Pero además porque la zona en la que estamos es apta para la producción de este tipo de bebidas” comenta Ghirardelli.
El Valle de Río Negro cuenta con historia y renombre en la producción de vinos, pero sobre todo de vinos espumantes. Hacia fines de 1950 la bodega francesa Möet & Chandon desembarcó en la Argentina y en una avanzada por el Valle el Barón Bertrand de Ladoucette (el famoso Barón B) y parte del equipo técnico, decidieron comprar y plantar vides en unas 400 hectáreas del Valle Medio del Río Negro (en la localidad de Pomona). El estudio realizado por este grupo de técnicos indicó que la región tiene excelentes condiciones agroecológicas para el cultivo de la vid y elaboración espumantes de calidad. Sobre todo, por su parecido en latitud, altitud y clima con la región de Champagne (días cálidos y noches frías). En el año 1970 Chandon decidió trasladar toda su producción a Mendoza y esta finca quedó en poder de la familia Canale.
Agrestis como bodega se consolida en los primeros años de la década de 1990. Con la convertibilidad pudieron acceder a traer plantas desde Francia (clones específicos de Chardonnay y Pinot Noir para la elaboración Champagne). “Nos sumamos a una importación que estaba haciendo Chandon para llevar plantas vivas a Mendoza, y eso fue muy importante para nosotros porque desde un principio quisimos hacer espumantes de calidad” amplía Norberto. Después incorporaron otras cepas como Cabernet Sauvignon, Gewürztraminer, Malbec y Merlot.
Actualmente Agrestis es una de las dos bodegas que produce espumantes en la provincia de Río Negro. Cuentan con una finca que tiene una superficie de 20 hectáreas, de las cuales 12 están implantadas con viñedos. La capacidad de elaboración de la bodega es de 150 mil litros por año. Actualmente producen espumantes con dos etiquetas: Agrestis y Tenuis, ambas elaboradas bajo el método tradicional.

En la línea Agrestis el foco está en espumantes jóvenes con 12 a 18 meses en contacto con las lías. Producen un espumante 100% Pinot Noir Nature, un espumante Blend de Chardonnay y Pinot Noir también Nature, y un espumante Demi Sec 100% de Pinot Noir llamado “Juanita” (en honor a la primera nieta de Norberto”. “En la línea Tenuis los vinos pasan como mínimo 24 meses en contacto con las lías, pero el degüelle, encorchado y posterior comercialización se va dando a demanda, por lo que es posible contar con espumantes con 30 meses o más en contacto sobre lías” nos cuenta Alfredo, hijo de Norberto y responsable de la bodega desde hace unos 5 años. La línea cuenta con 3 espumantes: Tenuis Blanc de Blancs Brut Nature (100% Chardonnay), Tenuis Rosé 100% de Pinot Noir Brut Nature y Tenuis 100% Gewürztraminer Extra Brut. Completan la elaboración vinos tranquilos con la marca Agrestis: Malbec, Cabernet Sauvignon, Pinot Noir y Chardonnay (totalizando aproximadamente un 25% de la producción).
“Somos la única bodega en la Argentina que elabora un espumante de Gewürztraminer, cepa originaria del sur de Austria, y que en nuestra región da un vino con muy buena acidez natural. No necesitamos hacer ningún tipo de corrección. Es muy frutado, con notas a manzana y a lichi, la típica fruta china” cuenta Norberto, quien luego nos instruye contando el origen de la palabra: Gewürz significa aromático y Traminer da nombre al origen de donde viene la cepa (Tramin en el Bajo Tirol, hoy Italia). “Nos gusta hacer espumantes como los que nos gusta tomar a nosotros: con bajo contenido de azúcar, Nature o Brut Nature, con procesos muy cuidados y partiendo de uva 100% propia de alta calidad y sanidad” nos cuenta Alfredo. “Tenemos el espumante Juanita, que es un Demi Sec, que nació contra mi voluntad, pero la nueva generación me convenció de hacer un espumante dulce; no me arrepiento de haberlo hecho porque se vende muy bien, aunque yo no lo tomo” desarrolla Norberto, con una sonrisa.
Norberto Ghirardelli, un enamorado del champagne francés, lleva más de 30 años haciendo espumantes de alta calidad en el Alto Valle de Río Negro. En los últimos 10 años se han sumado a trabajar en la bodega dos de sus hijos: Alfredo (ingeniero agrónomo a cargo del viñedo y la bodega) y Florencia (quien es la responsable del área de enoturismo y eventos corporativos).

La aspiración de la familia es crecer en volumen un 20% y consolidarse como una bodega familiar productora de espumantes de calidad en Patagonia. “Esa escala nos permitirá seguir teniendo un control del viñedo, de la calidad del proceso de elaboración del vino y de los espumantes” nos cuenta Alfredo.
El sueño de la familia es que algún día el consumidor elija tomar espumantes Agrestis y Tenuis, y salir de las marcas tradicionales y más conocidas. Los primeros 35 años del emprendimiento ayudaron a que esto ocurra en la región cercana a la bodega. El objetivo es que la nueva generación haga lo propio a nivel nacional.
Por Tami y Hernán (Paladar Noir)