Aldo Graziani, figura clave en la escena gastronómica argentina, traerá su visión del vino y la música a Mendoza con la apertura de un nuevo y ambicioso proyecto durante 2024. Sin embargo, sus negocios en Buenos Aires ya son reconocidos por su excelencia en el mundo del vino. Entre ellos Aldo’s se destaca por tener una de las cavas más impresionantes del país, con una carta que cuenta con más de 700 etiquetas para que los clientes tengan una amplia variedad al elegir sus bebidas en la mesa.
Graziani ha evolucionado su propuesta a lo largo de los años, con una historia que se remonta a la apertura del primer Aldo’s en el casco histórico de la Ciudad de Buenos Aires en 2011. Su basta carrera en el mundo del vino como sommelier, le ha dado un enfoque en el vino, el pilar fundamental que distingue a sus establecimientos. La carta de Aldo’s tiene una cuidadosa selección, que va desde productores pequeños hasta bodegas tradicionales. El restaurante ofrece una experiencia ítalo-americana que gira en torno al vino.
La versatilidad de Aldo’s se extiende a su público objetivo, con un ambiente canchero y descontracturado pero cuidadosamente diseñado en cada detalle para satisfacer a una amplia gama de clientes. “Es un lugar donde convergen personas de diferentes edades y gustos, gracias a nuestra amplia carta tanto de vinos como de platos”, explica Graziani, detallando una oferta gastronómica diversa que incluye desde platitos o entradas como: calamares españoles, selección de quesos de pasta dura blanda y semidura, embutidos, chacinados artesanales, morrones y aceitunas, entre otras opciones. Platos con pastas, como gnocchi con gorgonzola de papa, clásico, servido con crema de gorgonzola u orecchiette a la meditarránea hechos a mano con pomodoro fresco, muzzarella, oregano, perejil y albahaca. Un clásico de la casa, que lleva 12 años en la carta, es el risotto fungui con arroz carnaroli y hongos salteados, bien mantecado con queso duro de oveja. Otro de los arroces que también se distinguen es el risotto de mar con arroz italiano terminado con manteca de limón y hierbas. A su vez, se pueden encontrar diferentes cortes de carne con acompañamientos. Para el final, los postres: tiramisú con mascarpone, cacao bien amargo, savoiardi y café en preparación clásica, flan de dulce de leche con crema, volcán con helado de mandarina, Bonbolin de masa aireada, relleno con ricotta, pistachos, cítricos, terminado con chocolate, entre otros.
La música juega un papel fundamental en todos sus emprendimientos, “tenemos una curadoría musical para cada lugar. En Aldo’s, ya sea en el restaurante o en la vinoteca, siempre suena jazz y va a ser así. Al mediodía, a la noche. Es el estilo perfecto para ser la compañía ideal, no tiene contraindicaciones. Jazz y vino…y comida. En Picsa, que es nuestro lugar de pizzas bien estilo porteño, solamente suena rock nacional. Y así, para cada lugar”, cuenta el empresario.
Con un ojo siempre puesto en la evolución de la industria, Graziani celebra el auge del vino argentino, especialmente el enfoque en las denominaciones de origen y la personalidad distintiva de cada productor. Además, destaca el cambio en los patrones de consumo, observando cómo los jóvenes argentinos se acercan cada vez más a este mundo.
Aunque ya cuenta con una notable cantidad de emprendimientos, Graziani tiene la mirada puesta en el futuro, especialmente en su próximo gran proyecto en Mendoza, que promete ser un epicentro de vibrante vida nocturna, excelente gastronomía y música de primera línea con un club de jazz. “Si Mendoza crece, a mi me crece el corazón. Hacer algo grande en la provincia es devolverle un poco de todo lo que ella me dio”, concluye Graziani, cuyo compromiso gastronómico continúa marcando el rumbo de la escena argentina.
PARA SABER
Dirección: Arévalo 2032, Palermo, CABA.
Horarios: Lunes a jueves y domingos de 12 a 00 horas – Viernes y sábados de 12 a 01 horas.
Reservas: Teléfono +54 11 4773 3739 / Whatsapp +54 11 6611 0314
Instagram: @aldosrestaurante
Fotos: Aldo’s Restoran