Es una de las mujeres destacadas de la industria del vino de Argentina de la actualidad. En marzo de 2022 fue nombrada embajadora de la Marca País, reconocimiento otorgado por el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, por su trabajo para posicionar al vino argentino a nivel internacional. Trabaja en Wines Of Argentina (WOFA) desde 2009 y su principal convicción es la promoción del vino de nuestro país en el mundo.
-¿Cómo comienza tu vinculación con el vino?
-Mi vinculación con el vino no es familiar, no provengo de una familia con trayectoria vitivinícola. Pero mi abuelo tenía una finca en Rivadavia.
-Pero el vino estaba presente en la mesa…
-Sí, siempre. Mi abuelo hacía su vino y si no iba hasta Norton y traía sus damajuanas. Nos criamos con el vino en la mesa y también yendo con él a la finca. Además, tenía un socio y ambos habían conformado lo que hoy sería un broker de vinos. Representaban a más de 70 bodegas. Claramente ya estaba en mí el gen de trabajar para muchas bodegas.
-¿Cuál fue tu primera aproximación a la industria?
-En la secundaria durante tres años consecutivos, en la feria de ciencias, trabajé sobre un proyecto que se llamaba “Vitivinicultura y Mercosur, ¿realidades opuestas?. Esto fue en los años 1997, 1998 y 1999. Era una idea de articulación para la industria. Hicimos muchas encuestas en la zona este y recorrimos bodegas. Obtuvimos un muy buen pantallazo de lo que era el vino de ese momento en Mendoza.
-¿Qué estudiaste?
-Relaciones Internacionales, porque me gustaba mucho la parte de política internacional y también del mundo de los negocios en ese ámbito. Cuando me recibí me fui a vivir cinco años afuera. Ahí trabajé un tiempo en un retail en Inglaterra, esa fue mi vinculación con el vino en mi experiencia fuera del país. Eso me hizo conectar más con los sectores de marketing y también con el producto. Eso fue en el año 2004 y ya había vinos de Argentina, pero con una presencia ínfima. Estábamos en los fondos de las góndolas. Cuando regresé a Argentina (en el año 2009) un amigo me comentó que había una búsqueda en WOFA. Me presenté y quedé seleccionada. Al mes de estar de regreso en Argentina ya estaba trabajando acá.
-¿En qué rol?
-Como área manager para Estados Unidos, Latinoamérica y Brasil. El trabajo era vincular bodegas de Argentina para mostrar en esos mercados. Y hacíamos eventos para difundir Argentina.
-¿Las bodegas comprendían el trabajo que estaba realizando Wofa?
-Era un momento de mucha efervescencia. Argentina estaba creciendo mucho, a dos dígitos. Eran tasas muy importantes. Y al poco tiempo me di cuenta de que este trabajo era lo que me gustaba. Siempre tuve la idea de entender que era muy interesante la idea de trabajar para otros. Sobre todo, por la amplificación y por pensar que estás generando un bien superior o un valor común.
¿Cuántos socios tenía Wofa en esa época?
-El pico de socios fue en el año 2011. Llegamos a tener 217 bodegas de todas las regiones de Argentina. Pero de 2012 en adelante decrecimos. Hoy estamos nuevamente en niveles históricos, tenemos 200 socios.
-Todo eso indica que hay mucho trabajo por hacer…
-Trabajamos mucho. En ese comienzo había muchas acciones por realizar en cada uno de los países. El mercado acompañaba y teníamos fondos. Con el tiempo tuvimos que ser mucho más creativos. Empezamos a tener menos actividad, pero mucho más segmentada. Ahí cambió un poco el formato de trabajo. Pero siempre entendiendo que en el largo plazo, menos es más…
-¿Cómo ha sido para vos atravesar este crecimiento tan destacado del vino de Argentina en el mundo?
-Eso es algo espectacular y totalmente emocionante. Es increíble el lugar al que hemos llegado. Cuando yo vivía en Reino Unido, en 2004, prácticamente no existíamos.
-¿Pensaste alguna vez que íbamos a tener vinos de clase mundial o que íbamos a ser tan respetados en el mercado?
-En algún sentido sí. Yo sentía que teníamos con qué, pero que había que explotarlo. Sobre todo que había que afilar cosas. Igualmente considero que aún queda un largo camino por recorrer. Lo importante es que los argentinos tenemos un carácter emprendedor y creativo, sumamente importante. Siempre con esa idea de hacer con lo que tenemos, a pesar de las dificultades. Desde afuera nos ven como exitosos gracias a este carácter.
-¿Cuánto crees que tuvieron que ver estos winemakers tan famosos de Argentina de la actualidad en nuestros vinos de clase mundial?
-Uno de los pilares de nuestra última campaña fue justamente el carácter pionero de todas estas personalidades. Personalmente creo que ese es un elemento diferencial. Somos muy apasionados y considero que esa es una ventaja sobre otros países del mundo. Todo ha sido un proceso de mucho tiempo. Al principio veía como cierta timidez o falta de confianza, sobre lo que podíamos lograr. Hoy en día hemos superado esa etapa y seguimos avanzando.
-Este año fuiste nombrada “Embajadora de Marca País”, ¿qué significó eso para vos?
-(Piensa y respira profundamente) La verdad es que me sentí muy honrada. Desde que ingresé a Wofa mi deseo siempre fui contribuir a algo más grande. El haber recibido este nombramiento me hizo pensar que se estaba reconociendo el trabajo. Hay mucho tiempo y muchas horas de mi vida, dedicadas a este trabajo. Creo que todo este esfuerzo valió la gloria.
-¿Cuál es el tu visión sobre el futuro de Argentina?
-Mi humilde visión para el vino de Argentina es hacer hincapié en cuatro aspectos: el primero es el trabajo colaborativo. Siento que tenemos que trabajar de forma conjunta. Somos muy chicos afuera y el mundo es demasiado grande. Eso implica poner objetivos en común y dejar de lado otros temas. Tenemos que estar todos en una misma vereda. Me refiero a bodegas y organizaciones.
Como segundo aspecto destaco la importancia de realizar una vitivinicultura sostenible. Hoy en el mundo ya no hay espacio para dudar sobre si hay que ser sostenibles o no. Hay un camino recorrido sobre la sustentabilidad ambiental, pero creo que la deuda pendiente está con el tema social y ahí ingresa la perspectiva de género. Necesitamos poder visibilizar el trabajo de tantas mujeres que hay dentro de la industria, en toda la cadena. Espero en diez años ya no hablemos más de este tema. Es clave que esto suceda. Los equipos diversos son más creativos y las empresas que son inclusivas son más rentables. Hay un montón de beneficios. Tanto por la parte ética como por la parte económica. Tenemos que apuntar ahí.
Otro gran tema es la innovación. Nosotros en Wofa trabajamos mucho sobre este aspecto durante la pandemia y nos sentimos capacitados. Es importante comprender como podemos innovar y su metodología. Pienso que tenemos que tener herramientas para poder ayudar a las bodegas.
Y por último la transformación digital. Vamos camino hacia un mundo que ya es distinto y tenemos que estar preparados para comunicar de otra manera.
-¿Cómo sostenemos ese índice de aumento de consumo de vino que se registró durante la pandemia?
-Hay que tener en cuenta que vamos hacia un mundo donde el consumidor va a tomar menos vino. Tenemos que estar preparados para eso. Hoy se habla mucho de tendencias de bienestar y también hay leyes de tolerancia cero. Tenemos que incorporar todo esto y comprenderlo. Las personas van a consumir menos vino, pero de mayor calidad. Argentina tiene que seguir trabajando en el mundo sobre su posicionamiento en vinos premium y ultra premium. Ahí es donde vamos a poder jugar los partidos. Hoy no tenemos volumen para competir con España o Chile, que venden en la base de la pirámide. Pero si podemos pensar en el consumidor que toma vinos eventualmente y que busca algo destacado o que lo motive. Creo que ahí esta nuestro espacio. Tenemos que trabajar la parte de las experiencias y lo conceptual del producto. Todo esto sin caer en la complejidad, la cual termina asustando al consumidor. Creo que es importante encararlo por el lado del disfrute. El enoturismo y la gastronomía son las columnas vertebrales de este aspecto. Todas estas experiencias nos van a permitir vender vinos caros y seguir creciendo como categoría.
PING PONG
Un restaurante: Cochinchina Bar
Comida favorita: Pastel de carne
Un vino: Pinot Noir
Signo del zodíaco: Virgo
Hincha de: Ninguno
Programa favorito de TV: No veo TV
Una marca de ropa: Chanel
¿Quién era tu ídolo cuándo eras chico?: Mi abuela Magdalena
¿Cuántos seguidores tenés en Instagram?: 1239
¿Un destino de vacaciones?: Bali en Indonesia