Marcela Devalle y Lorena Ruzo, dueñas de Rincón Gieco, cuentan que: “el origen del restaurante se gestó con la intención de crear un espacio gastronómico vinculado a la Bodega Gieco. Especialmente para aquellos que buscan una alternativa local, rápida, deliciosa y asequible en contraposición a los niveles de precios de otras opciones en Mendoza. Un parador verde rodeado de viñedos, árboles frutales e imponentes álamos. Una experiencia para todos los gustos.”
Inaugurado a fines del 2020, Rincón Gieco ha ido ampliando su carta para satisfacer distintos gustos, incluyendo opciones vegetarianas, veganas y celíacas. Actualmente, cuentan con cinco variedades de sandwiches: jamón crudo con aceite de oliva, orégano y tomate fresco; vegetariano con zucchinis asados (propios, de la huerta), queso gratinado, aceite de oliva y tomate fresco; de mortadela con pistachos, queso gratinado, aceite de oliva y tomate fresco, de salame con queso, aceite de oliva y rúcula y por último vegano de zucchinis asados, pasta de berenjenas, aceite de oliva y tomate fresco. Opcional el pan sin tacc en todos los sandwiches.
La comida se puede acompañar con los vinos de la bodega, por copa o botella, con variedades como: Malbec, Cabernet Franc y Petit Verdot, entre otras. También ofrecen otras bebidas como: sidra, cervezas, vermut y bebidas sin alcohol. Los postres son del día, algunos de ellos son: flan con crema y dulce de leche, cuadraditos de coco y dulce de leche o el típico mendocino, el vigilante.
Su ubicación estratégica (en la calle Guardia Vieja al 1506 de Vistalba) de rápido acceso y junto a la ciclovía, facilita a los visitantes disfrutar de una parada deliciosa sin perder tiempo en largos almuerzos. Es por esto que reciben desde familias y turistas hasta deportistas que pasan por la puerta y buscan una experiencia sin estructuras. “Queremos que los visitantes disfruten del vino y del lugar sin reglas establecidas. Una vivencia para todos por igual”, suma Marcela.
Pero no solo se trata de comida. Este espacio invita a la relajación. Con mesas sobre una acequia para sumergir los pies mientras se come, mesas con fardos de pasto y un amplio deck con vistas a los viñedos, ofrece un ambiente típico mendocino para disfrutar del entorno como un auténtico mendocino.
A principios de este año se unieron junto Fabián Esquerra de Mendoza Bikers y abrieron otro local en Chacras de Coria, para expandir la misma propuesta de “parador verde y rico”, para los visitantes del poblado y turistas que eligen la opción de conocer la zona en bicicleta.
La historia de Rincón Gieco tiene que ver con la historia familiar de su dueña Marcela, una finca que ha pasado de generación en generación y que hoy en día es una productora de vinos. Con un viñedo de 16 hectáreas y una bodega propia inaugurada hace unos años, el lugar ofrece degustaciones descontracturadas sin necesidad de reserva, invitando a los visitantes a disfrutar del paseo entre viñedos y terminar la experiencia con una copa de vino. La visita, que incluye la degustación de tres vinos, tiene un costo de $ 7000.
Además de sus vinos, en el espacio de Vistalba cuentan con una tienda que ofrece productos regionales de pequeños productores (aceite de oliva, destilados, conservas, mermelada casera, entre otros), priorizando siempre el apoyo a emprendedores locales.
PARA SABER
Dirección: Guardia Vieja 1506, Vistalba / Pannocchia 5407, Chacras de Coria.
Horarios: El restaurante abre de martes a domingo de 11 a 18 horas en Vistalba y de 17 a 23 horas en Chacras de Coria.
Reservas: No trabajan con reservas, es por orden de llegada
Instagram: @rincongieco
Fotos: Rincón Gieco